*En marco de la entrega de la iniciativa para la Ley de Seguridad Ciudadana, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo, Rubén Oyarbide Pedrero, reveló que aterrizar el nuevo modelo policial tardará aproximadamente un año, aunque dijo los resultados no serán inmediatos en lo que respecta a reducir los índices de inseguridad.
Acompañado de la Secretaria de Gobierno, Cristina Torres Gómez, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública en la Entidad, Rubén Oyarbide Pedrero, entregó este día ante el Poder Legislativo la iniciativa para la nueva Ley de Seguridad Ciudadana de Quintana Roo, planteada por la gobernadora Mara Lezama.
La nueva ley con el nuevo modelo de seguridad, posterior a su aprobación desde la XVII Legislatura, tardará aproximadamente un año en aterrizar, sobre todo en cuanto a equipamiento de la corporación, cambio de nombre, y de imagen, que se contemplan en los transitorios de la propuesta de Ley.
Respecto de reducir los índices de inseguridad en el Estado, Oyarbide Pedrero refirió que lamentablemente los resultados no se verán de manera inmediata, pero aseguró que, desde el inicio de la actual administración estatal, se ha trabajo de manera decidida para combatir los delitos y también el añejo flagelo de la impunidad contra los presuntos delincuentes.
La nueva ley hará de la policía de Quintana Roo una corporación con políticas preventivas y ya no solo de reacción cuando suceden los delitos, y serán los ciudadanos que desde el centro de este nuevo modelo policial marcara las pautas y los lineamientos, con enfoque de respeto a los derechos humanos, y restablecimiento de la paz.
“En lo que respecta a los resultados, estos no se dan de la noche a la mañana, estamos trabajando desde que inicio esta administración, estamos haciendo detenciones ante una impunidad que existía, cosas que se hacían antes y que nadie hacia nada, ahora estamos haciendo todo para combatir todas esas cosas”, dijo Oyaerbide.
Confirmo que entre las novedades de esta nueva ley, habrá una dirección de policía de investigación que apoyará en sus labores a los fiscales de investigación, antes agentes del ministerio público.
La policía de proximidad, que como “policías de barrio”, transiten por el tejido social para conocer las raíces de los problemas y el origen de los delitos y la violencia para no realizar detenciones sin ningún objetivo claro será otro de los ejes principales de esta nueva ley de seguridad.
Con relación a los policías de a pie, que a diario exponen sus vidas en el combate a la delincuencia, aseguró el Secretario de Seguridad Pública que se mejorarán sus condiciones de trabajo, con mejor equipamiento y armamento, incremento a sus salarios, mejoramiento al programa de retiro, y la profesionalización de los elementos.
Respecto de los incrementos salariales, señaló Rubén Oyarbide que esto podrá verse en el mediano plazo, una vez que aterrice el nuevo modelo de seguridad ciudadana, y se vayan ajustando al alza los presupuestos de la dependencia.
“Este también es uno de los intereses principales de la gobernadora en este tema de seguridad pública, garantizar la permanencia y la seguridad de los policías, se refuerza el servicio profesional de carrera, la academia de policía se eleva a universidad y donde todos pueden ingresar y podrán ser licenciados en la materia como lo requiere la ciudadanía, policías profesionales”.