La periodista deportiva Vanessa Huppenkothen incendió las redes sociales pero no por su carrera periodística o de modelaje.
Se encontraba caminando por las calles de la Ciudad de México cuando vio a un repartidor de Uber Eats con discapacidad y lo subió a su cuenta de Twitter.
En la publicación Vanessa cataloga a la persona como un chingón, pero no gustó ni tantito a muchos usuarios de la red del pajarito azul.
Seguramente la admiración que la conductora profeso por el repartidor era genuina, pero usuarios de Twitter lo vieron como una manera de “romantizar la precariedad”.
La publicación de Huppenkothen, con más 35 mil me gusta y de 4 mil comentarios, se llenó de reclamos y hasta mensajes de odio en contra de la periodista.
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