Japón. – En el Parque Safari de Nasu, ubicado en la prefectura de Tochigi, Japón, un tigre de Bengala de 10 años que no estaba en su recinto vallado, como se esperaba, atacó a un hombre, a una mujer, y arrancó la mano de una cuidadora de 20 años.
Según reportes de medios de comunicación en Japón, el tigre macho de 10 años, que mide unos dos metros de largo y pesa 150 kilogramos, fue encontrado por cuidadores en un pasillo que conduce a una zona de exhibición; en el ataque, le arrancó la mano a la mujer.
En un comunicado de prensa difundido en su sitio web, el Parque Safari de Nasu dijo tras el incidente del tigre:
“Hoy en la mañana ocurrió un accidente en la casa de animales del tigre y un empleado resultó herido. Estamos confirmando la condición de empleados, investigando la causa del accidente, y contaremos más (sobre el caso) tan pronto como se tengan los detalles”.
El Parque Safari de Nasu, en Japón, añadió en su comunicado que por el accidente, “el parque permanecerá cerrado temporalmente y lamentamos las molestias” ocasionadas.
La joven que perdió la mano en Japón tras el ataque del tigre fue trasladada en helicóptero médico al hospital; la otra mujer fue mordida en varios lugares y el hombre resultó herido en la parte posterior de la cabeza, según los medios de comunicación locales.
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El pasado 31 de diciembre se informó que River Rosenquist, joven de 26 años y empleado externo del zoológico de Naples, en Florida, entró a un área restringida para acariciar a un tigre macho malayo de 8 años que terminó atacándolo; policías del condado de Collier tuvieron que disparar y matar al felino.
Con información de: unotv.com