Miguel, de 5 años de edad, regresaba a casa junto con su abuelita tras un día en el kínder cuando a pocos metros de su hogar, en la colonia Otilio Montaño en Jiutepec, Morelos, un perro raza pitbull de color café salió y atacó al niño, causándoles graves heridas en cráneo y rostro. 

Ante los gritos de auxilio de Ana Luisa, abuela de Miguel, los comensales de una cocina económica cercana salieron a auxiliar al menor. Sin embargo, en entrevista para un medio local, la señora explicó que entre más golpeaban al perro, más se aferraba a su nieto. 

“Yo pedí que llamaran a una ambulancia, pero nunca llegó, me prestaron un carro para traerme al niño”, explicó la mujer.

El menor fue trasladado a una clínica del IMSS en donde fue intervenido de emergencia. Horas después, su padre, Miguel Ángel, informó que el pequeño había salido de cirugía pero que su situación era crítica. 

Mi niño está en “código rojo”, explicó.

Miguel Ángel detalló que aunque el menor ya había sido atendido, seguía en shock pues había despertado de la cirugía y aseguraba que aún sentía las mordidas del perro. Detalló que ver a su hijo en ese estado fue devastador, pues las heridas eran muy graves.

“Literal tenía desprendida toda la parte del cráneo, se le veían casi ya los sesos, los dientes, fue fatal”, dijo.

El hombre aseguró que su prioridad es el bienestar del pequeño Miguel, sin embargo, urgió porque el dueño del perro se haga responsable, pues los gastos por la atención médica de su hijo, van en aumento.

“Yo sé que el animal es animal, pero tiene un dueño y yo quiero que se proceda correctamente para que nos empecemos a guiar porque se necesita que se lleven al perro y al dueño del perro para que se haga responsable”.

(Con información de Aristegui Noticias)