La muerte de 17 bebés en el Estado de México, Michoacán y Guanajuato involucra en un nuevo escándalo de salud al magnate tapatío Carlos Álvarez Bermejillo, propietario de la empresa que fabrica los productos de nutrición que presuntamente contenían las bacterias que provocaron los decesos en tres hospitales públicos y uno privado.
Álvarez Bermejillo es el propietario de Pisa Farmacéutica, cuya filial Productos Hospitalarios S.A. de C.V. fue identificada por el secretario de Salud del Gobierno federal, David Kershenovbich, como la empresa responsable del suministro de las nutriciones parenterales que contenían la bacteria Klebsiella oxytoca que provocó las muertes de los menores.
En 2019, Pisa Farmacéutica fue sancionada por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) con la suspensión de operación de sus plantas ante el incumplimiento de medidas sanitarias en sus instalaciones y también fue inhabilitada por la Secretaría de la Funcionalistas Pública por actuar con dolo y proporcionar información falsa para obtener un contrato con el Instituto Mexicano de Seguridad Social (IMSS) en un proceso de licitación de 2017.