La vida da muchas vueltas, hasta el punto de que ninguno de nosotros tenemos idea de cómo estaremos en nuestros 90’s.
Un abuelito de 93 años que se encontraba en situación de calle fue adoptado por una generosa familia residente en Bacalar.
El abuelito fue identificado como Aaron Hernández Guzmán, quien no tenía hogar y se encontraba solo.
Desinteresadamente la familia lo invitó a que viviera con ellos y abandonara la calle, cosa que sucedió, provocando la admiración de todos
Don Aaron es originario de “El Naranjo” en Hidalgo y llegó Bacalar para trabajar cuidando el rancho de un docente para después emplearse en Caobas.
Su caso se viralizó luego de haber vivido en casa de otro adulto mayor, quien pidió ayuda a los medios de comunicación.
Se buscaba encontrar a los familiares del abuelito, pues vivir en la calle es peligroso y más para una persona de su edad.
Debido a la gran difusión la historia de Don Aaron llegó a oídos de Marí Flor, quien habló con su familia y decidió adoptar al señor
“Lo dejé de ver por aquí […] él siempre fue buena persona y muy trabajador”, explicó.
La adopción se hizo oficial luego de que tanto la mujer como Don Aaron acudieron al DIF municipal y firmaron un acta compromiso para que el abuelito se quede bajo su custodia.
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