La mañana del lunes un grupo de habitantes del fraccionamiento Portoalto se manifestaron en las afueras de las oficinas de la constructora Javer. Para reclamar los daños a sus casas luego de haberlas habitado durante 4 meses.

Los quejosos refirieron que les cometieron un presunto fraude al vendérselas como casas lujosas con un valor de 2 millones de pesos y, estas presentan vicios ocultos. Aunado de no tener las características de la casa muestra que les prometieron que serian.

Destacaron que les mintieron a la hora de la venta, con casas excesivamente caras y de mala calidad. En las que no les han respetado las garantías al darles largas a la hora de sacar la cita. Es ahí cuando se vence su garantía pues muchos de ellos la habitaron meses después de la compra. Indicaron que las calles presentan demasiados baches, coladeras en mal estado y no cuentan con seguridad, pese a que la incluía a la hora de la compra.

Los inconformes declararon que los mismos arquitectos e ingenieros han aceptado la problemática, derivada a la mala calidad de la mano de obra. Pues muchos de los albañiles contratados abandonaron el proyecto para ir a trabajar a las obras federales como lo es el Tren Maya.

Cabe mencionar que son alrededor de 125 casas las afectadas en todo el fraccionamiento y continúan con las ventas de las mismas.