La carta a Fonatur que enviaron los empresarios el mes pasado para cambiar el trazo del Tren Maya fue tan sólo el inicio. La inconformidad ahora se dijo de frente en una reunión entre Asociaciones de Hoteles de la Riviera Maya y de Tulum y autoridades federales.
Estuvo ahí el director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Rogelio Jiménez Pons. Le expusieron las afectaciones viales que generarán las obras del proyecto, y solicitaron que se analicen alternativas que puedan aminorar estos impactos.
Toni Chávez, presidente de la Asociación de Hoteles de la Riviera Maya (AHRM), fue quien dio voz a la inconformidad. Solicitó que se revisen el trazo, para reubicarlo en la medida de lo posible, y así evitar afectaciones en la infraestructura de los hoteles.
Añadió que en donde sea necesario utilizar estos espacios particulares, que el gobierno emprenda negociaciones con lógica y de acuerdo con la realidad.
Esta asociación y el Consejo Coordinador Empresarial solicitó anteriormente en una carte que el Tren Maya no ingrese por la carretera federal a Solidaridad. Piden que lo haga por por el Arco Vial, a modo de periférico.
David Ortiz Mena, de los hoteleros de Tulum, externó las preocupaciones del sector turístico. Solicitó que se dé certeza en la propiedad de la tierra en cuanto a la posible compra de predios para el paso del tren. La obra generará tráfico, no solo para los turistas sino para el personal que labora en los hoteles, principalmente.
En respuesta, Jiménez Pons señaló que el tren tendrá como fecha de inicio de operaciones en diciembre de 2023. Explicó que los cambios que se han dado a los trazos originales obedecen al tipo de suelo de la región.
También prometió que alrededor de la obra del tren se creará un centro logístico para la distribución de mercancía, materia prima y combustibles. También habrá un centro financiero y un centro de distribución de personal de optimice la movilidad de la población local trabajadora.
Sin embargo, el funcionario federal no les dio una respuesta afirmativa, por lo que el Tren Maya sigue su ruta por o a un costado de la carretera federal.