Los niños de hoy en día ya no sueñan con ser futbolistas, bailarines, astronautas o profesores, ser influencer se ha convertido ahora en la profesión más deseada para los pequeños, y no es para menos: ¿A quién no le gustaría ganar dinero con su afición, tener siempre regalos gratis, así como ropa, viajes, comida y mucho más?

Aquellos creadores de contenido que consiguen labrarse un nombre en el sector digital y crear una gran comunidad de seguidores, pueden ganar sumas de dinero estratosféricas. Por eso mismo, cada vez son más las personas que apuestan por esta profesión con la intención de agarrarse a un filón que cambie su vida para siempre. Tal y como ha sucedido con los habitantes de Tulsi, un pueblo de la India.

Situado en la región india de Chhattisgarh, Tulsi es conocido porque más de un tercio de la población se ha lanzado a la aventura de las redes sociales con la intención de que a través de Youtube u otras plataformas consigan duplicar sus ingresos a final de mes. 

Esta fiebre por convertirse en creador de contenido empezó hace dos años cuando Gyanendra Shukla y Jai Verma dejaron sus puestos como ingeniero y profesor para comenzar a grabar todo tipo de vídeos por la localidad. Una decisión que les hizo duplicar su sueldo a final de mes y, en consecuencia, cientos de vecinos se interesaron por su nuevo trabajo.

El contenido de ficción es el favorito de los habitantes

Al parecer, tal y como asegura India Times, pasaron de ganar 15.000 rupias (187 euros) a conseguir al mes más de 30.000 rupias (alrededor de 400 euros), gracias a un canal de Youtube que tiene más de 100.000 suscriptores y más de 40.000 reproducciones de media por publicación.

Desde entonces, su experiencia se convirtió en un halo de esperanza para los habitantes de su pueblo que no dudaron en lanzarse a la aventura de las redes sociales con el sueño de que su dedicación y duro esfuerzo diera los mismos resultados que los de Gyanendra Shukla y Jai Verma. A día de hoy, se estima que de los 3.000 habitantes que hay, más de 1.000 tiene su propio canal de YouTube. 

Aunque el contenido más seguido es el de ficción, en el que los vecinos crean cortas historias en tono de comedia que triunfan más allá de las fronteras del pueblo, lo cierto es que hay de todo tipo: desde educacional, hasta DIY, de comida y mucho más.

(Con información de La Vanguardia)