La comunidad de Huay Pix, en este municipio, no solo se caracteriza por pertenecer al corredor turístico de la Laguna de Bacalar. Tiene una fábrica que trabaja productos derivado de la madera, que traen del Ejido Plan de Iguala.
La familia Azuara Tagle, instalada desde los orígenes de la comunidad, decidieron formar una empresa forestal. Se dedican a adquirir productos de los ejidos, tanto de Othón P. Blanco como de Bacalar, con la finalidad de surtir madera al mercado nacional.
Óscar Azuara, el mayor de los hermanos, explica que “el principal producto es la madera cerrada. La vendemos de manera estufada, también vendemos a Estados Unidos”.
Su labor incluye acudir a los ejidos para explicarles el método de trabajo. También debe solicitar permisos ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
El fin es que demuestren que el producto que extraen del campo es sustentable y las especies maderables se aprovechan. Para que puedan realizar la reforestación, por cada árbol talado, son cinco los que deben sembrar.
La gente con la que trabajamos tienen bien claro que ellos necesitan vivir de la selva, para poder hacerlo, la tienen que aprovechar para hacerla sostenible. El otro lado, del aspecto social, es que entiende que es un recurso renovable, pensar en sembrar para años futuros”
Óscar Azuara, produtor
Por otro lado, Aldo Azuara Tagle, informó que su papá inició la empresa en 1984, pero están establecidos como persona moral desde 1998. Decidieron comprar una nave, para que pudieran instalar un aserradero y ahora tienen sucursales en Tabasco, Chiapas, Campeche y Veracruz.
Recordaron que desde 1994, había mucha producción para surtir la demanda que en ese momento tenía el desarrollo turístico de Cancún y la Riviera Maya. Así, por cada árbol que derrumban plantas de diez a 20 árboles. Pero ellos están asociados con el Ejido “Tres Garantías” donde proyectan 2 mil 500 hectáreas de melina, para montar una planta de triplay.
Destacaron que no hay incentivos al sector forestal, por eso van lento en sus proyectos.
REFORESTACIÓN
Óscar Azuara destacó que los ejidos más grandes de Quintana Roo, están certificados SFC (Certificación de productos de madera y papel). Es una certificación internacional, que avala el buen uso del sector, pero también que las condiciones de los trabajadores tengan todas las prestaciones de ley.
En la reforestación están involucradas todas las familias de los ejidos, porque eso genera empleo. Algunos más tienen sus propios viveros; aunque lamentó que los jóvenes han emigrado a zonas urbanas por las pocas oportunidades de trabajo.
Invitaron a los jóvenes para que se involucren en los proyectos de la maderería, porque hace falta mano de obra para la fabricación de muebles.
VOLÚMENES
Según datos de la Secretaría de Economía, en Quintana Roo, la principal actividad económica es el turismo. No obstante, el sector forestal registra una producción de 63 mil 916 metros cúbicos de productos maderables con valor de 117 millones 200 mil pesos. Se ubica en el lugar 15 a nivel nacional. Su producción de especies tropicales se ubica en el quinto lugar con el 11.7% del valor de la producción. Esto representa un fuerte potencial de desarrollo, pero que hoy está en el abandono.
Por ello, los integrantes de este sector solicitan a los gobiernos de los tres niveles, que creen incentivos fiscales y apoyo directo a la producción. Así continuarán con la generación de empleos y que sea una alternativa para la diversificación económica de Quintana Roo.